De Victorias y Derrotas

Jorge Wagensberg, otro de mis amigos, dice que “una idea buena que no cabe en veinte palabras, no es una idea tan buena”.

Aplicando esta máxima, en su delicioso libro de aforismos “A más cómo, menos por qué”, Wagensberg nos regala una sucesión de ideas, donde en la mínima expresión del lenguaje, concentra el máximo de reflexión y conocimiento.

A veces la frontera entre la victoria y la derrota es difusa. Siempre he pensado (sin atreverme a atribuirme el pensamiento) que hay que celebrar, tanto una como otra, en ambos casos, significa que estás vivo, que sigues apostando, que juegas a la vida, que arriesgas, que luchas, que lates, y eso, siempre es motivo de celebración, porque lo contrario es morir (de cualquiera de las muchas formas que hay de morir en esta vida)

Lo único que no podemos celebrar nunca es la destrucción, aunque a veces la confundamos con victoria. El ejercicio de la destrucción siempre es individual (o sectario), pero las consecuencias de la destrucción son siempre colectivas. Nadie gana..y además, es vulgar.

Wagensberg lo explica mejor en sus aforismos:

[554]
Los que están a favor suelen estarlo con matices, los que están en contra sólo están en contra

[555]
Estar a favor une menos que estar en contra

[556]
Los que están en contra creen que los que están a favor están locos

[557]
Hay muchas más personas en contra que a favor

Para concluir:

[558]
Construir, actividad propia de los que están a favor, es ir desde cualquier cosa hacia un ente único e improbable, lo que requiere no poco tiempo, no poca energía y no poco conocimiento

[559]
Destruir, actividad propia de los que están en contra, es ir desde un ente único e improbable hacia cualquier cosa, lo que requiere poco tiempo, poca energía y poco conocimiento.

Un beso para los que siempre están a favor.

Inventar el Futuro

“El cambio provechoso se deriva de “catástrofes autoinflingidas”: La idea consiste en construir un invernadero en el que cultivar el nuevo orden –poner a prueba las nuevas formas de organización y el uso creativo de la tecnología-, quebrantar las reglas e inventar el futuro. Luego se anima al invernadero, para que con el paso del tiempo, se haga con la clientela y la plantilla de la antigua organización”.

“las pesadas burocracias de este siglo” –el pasado- “…serán sustituidas por grupos fluidos e independientes de solucionadores de problemas”.

Tom Peters

Tom Peters

Hace muchos años, en otra vida, Pere me regaló un libro: “Nuevas Organizaciones en tiempos de CAOS” de Tom Peters. Tardé un tiempo en empezar a leerlo, porque junto con el libro, venía una carta de amor que, por supuesto, acaparó mucha más atención y entusiasmo que las divagaciones de un gurú del management.

Cuando mi corazón se recuperó (nunca del todo –un petó Pere-), me acordé del libro y al leerlo descubrí una ventana a la imaginación, la libertad, la creatividad y la pasión, que ha condicionado intensamente mi bagaje profesional y personal.

Desde entonces, “el amigo Tom” és un entrañable compañero de viaje al que le debo muchas ideas, mucha esperanza y la sensación reconfortante de que ahí fuera hay alguien más loco que tú.

En 1994!!, Tom Peters ya decía cosas así:

“Bienvenidos a un mundo en donde la imaginación es el mejor recurso de la economía. Vivimos en tiempos locos, y en un mundo loco, las organizaciones tradicionales no tienen ningún sentido”.

“De hecho, unas redes dispersas y especializadas están pasando a ser la nueva –y efímera- espina dorsal de la empresa basada en el conocimiento. Conocimiento recogido de quien sea y donde sea y “enlatado” instantáneamente para satisfacer las más veleidosas necesidades de los clientes”

“Las sociedades y los Estados se deben transformar y lo mismo debemos hacer nosotros. Los ganadores de esta carrera serán los curiosos, los que están un poco chiflados y aquellos que tienen una pasión insaciable por el aprendizaje y la aventura”

“Sin confianza, no podemos esperar que la imaginación humana se movilice en busca de valor añadido”

“Si la creación de valor en la nueva economía requiere coraje, energía, diálogo, colaboración e imaginación, los lugares donde se cree deben obedecer a esos mismos principios”

“El alimento intelectual repartido mediante redes y sobre pedido, se convertirá en un elemento esencial de la infraestructura económica”

Tom Peters está chiflado, y me encanta!